La felicidad que brilla en el mundo es una felicidad sin base, y la felicidad sin base sólida, deja de ser felicidad y expone los vivientes a la vida de los trances, procurando siempre la felicidad, y cuanto más la procuran, más lejos se encuentra; y otros pasando por momentos insignificantes en la esperanza vaga de ser felices, muriendo y dejando de alcanzar la tal felicidad que en el mundo es tan hablada, pero que nunca fue encontrada, porque no hay nadie en el mundo que diga: “ ¡Yo soy feliz!” Porque cuando está bien de un lado, está mal de otro; cuando está satisfecho de un lado, mal satisfecho del otro, y por eso, la tal felicidad nunca fue encontrada.
¿Por qué? Porque el mundo es de luchas, y donde hay luchas, hay sufrimiento y no hay felicidad. Unos luchan por los amores, otros por negocios, otros para mejorar de vida, otros con enfermedades, otros para hacer vencer sus ideales, en la esperanza de esto, en la esperanza de aquello, en la esperanza de alcanzar lo que desean. En fin, la vida es de luchas, y donde existen luchas no puede existir felicidad. Existe sí, el sufrimiento y el sacrificio.
Lucha el rico, lucha el pobre, luchan todos. ¿Por lo tanto, si la naturaleza no es feliz, no regula, ¿cómo pueden regular?
Una vez que no están regulados, no son felices. El propio tiempo no regula, porque son hijos de esa naturaleza desregulada. Una hora frío demasiado, otra, frío irresistible, que castiga, maltrata y a veces mata. Lluvia, viento, en fin, expuestos ahí a la naturaleza que no regula. Enfermedades de todas las formas y de todas las especies. En el medio de todos los precipicios, enfrentando todos esos peligros de la vida, y muchas veces a punto de casi perder da vida. Por lo tanto, si son hijos de una naturaleza que no regula, ¿cómo los vivientes pueden ser felices, si no regulan?
La felicidad es una palabra que solo está en el nombre, conseguida para amansar y aliviar a los que no conocen la vida, como quien dice: - “Hagan esto para ver si son felices.” Y siempre procurando la felicidad y nunca encontrándola. ¿Qué felicidad puede tener la madre siempre preocupada por sus hijos? ¿Qué felicidad puede tener el padre preocupado de la misma forma? Y por estar preocupados, se maldicen sufren, luchan y enfrentan todas las dificultades: sol, lluvia, sereno, una infinidad de preocupaciones.
Esto es para probaros que la felicidad siempre quedó en la esperanza, y por eso ahí está la vida de aventuras, en la incertidumbre de todo y de sí mismo.
¿Qué hay de la felicidad? ¿Dónde está ella? Solamente con la INMUNIZACIÓN RACIONAL puede ser alcanzada, porque YO pruebo que el viviente inmunizado es un viviente feliz, es un viviente que está siempre cierto en todo y donde está lo cierto, ahí está la felicidad. Lo que está cierto, vive cierto y no en la incertidumbre, como todos viven.
YO, con la INMUNIZACIÓN RACIONAL, pruebo y compruebo como todos son felices, porque el viviente inmunizado tiene soluciones para todo, con certeza.
(1 Volumen, Libro UNIVERSO EN DESENCANTO, del RACIONAL SUPERIOR.
